domingo, 17 de marzo de 2013

Video reflexión del 17 de marzo de 2013


Video Reflexión del quinto domingo de Cuaresma


Te comparto la reflexión este quinto domingo de Cuaresma.

Si quieres acceder al video da click a la siguiente dirección:

http://www.youtube.com/watch?v=C5wuEd0dWwI

O bien encuentra el video al final de este blog de San Esteban.

Que tengas un buen domingo: ¡Que Dios te bendiga!

Reflexión 17 de marzo de 2013

Quinto Domingo de Cuaresma

Dios no nos quiere cautivos: ¡Nos quiere libres”

Ante un pueblo que ha vivido la terrible experiencia del destierro, Yahvéh, por medio del profeta Isaías, se muestra como el Salvador de Israel. El pueblo recordaba el modo de actuar de Dios presentado por el Éxodo: plagas que buscaban ablandar el corazón del Faraón, un paso impresionante a través del Mar Rojo, muerte de los enemigos aplastados por las aguas de ese mismo mar… en ese recuerdo estaba contenida una esperanza de liberación. Es por eso que Isaías invita al pueblo a no añorar actos del pasado: el pueblo debe abrir los ojos y ver que Dios está obrando para dar libertad a su pueblo, que el Señor les está preparando el camino de vuelta. El Pueblo no está solo: el Señor sostendrá su camino de vuelta hacia su tierra, Él quiere liberar a los suyos no sólo porque es un Dios fiel a su promesa sino porque el pueblo es de gran valor y es visto con ojos de amor por su Creador.

Es importante recordar como el pueblo en el Cautiverio vivía en la opresión, pero Dios da un giro inesperado a la suerte de este pueblo: Ciro, Rey de Persia, manda que los exiliados vuelvan a sus tierras. El dolor se convierte en bienestar, la tristeza en gozo, la desesperanza en sueño. ¡Nadie lo cree! ¡Ni los gentiles! Y tanto los que están por retornar, como los gentiles, descubren que Dios ha actuado a favor del pueblo. ¡Es imposible que el Señor se olvide de la promesa de estar siempre a favor de los suyos!

Pablo, en la carta a los Filipenses, describe cómo Cristo ha asumido la condición humana, como se ha humillado, como se ha hecho nada padeciendo la muerte. Pablo escribe esta carta desde la prisión. Sin embargo esta carta quiere animar a los cristianos de Filipo con el ejemplo de Jesús, pero también, con el propio ejemplo de Pablo, a no perder de vista la meta. Seguir a Cristo ha hecho que Pablo considere todo como basura: sus logros humanos, lo destacado de su formación religiosa, su nacionalidad, su pertenencia a la secta farisea, su modo exacto de cumplir la ley... Los criterios de valor han cambiado radicalmente y el Apóstol ha descubierto en Jesucristo su tesoro, su orgullo y su sentido en entregar la vida por el Evangelio.

Juan nos presenta la persona de Jesús como alguien que desconcierta por su forma de actuar. Para algunos que han visto sus signos y han escuchado sus palabras es un profeta, para otros alguien que viene de Dios. Para aquellos que no creen en Él: es alguien que engaña y alguien que no puede ser el Mesías por ser Galileo. Sin embargo Jesús se presentará como aquel que conoce al Padre, como aquel que lo ha oído y como aquel que comunica sus Palabras. De aquí que Jesús en el pasaje que leemos en este domingo pueda desenmascarar a aquellos que se siente con derecho de lapidar a una mujer sorprendida en adulterio. Dios, siendo la justicia misma, no quiere que el hombre que ha pecado muera. Por lo tanto, otros que han pecado no deben sentirse con el derecho de quitar la vida a una mujer, que en un acto de debilidad, ha fallado tanto o igual que aquellos que pretenden arrebatarle la vida.

P. Óscar Alejandro Hernández Zavala, m. j.

sábado, 2 de marzo de 2013

Video reflexión 03 de marzo de 2013



Video Reflexión del tercer domingo de Cuaresma

Te comparto la reflexión este tercer domingo de Cuaresma.

Si quieres acceder al video da click a la siguiente dirección:

http://www.youtube.com/watch?v=-EDJ395jwxc

O bien encuentra el video al final de este blog de San Esteban.

Que tengas un buen domingo, que Dios te bendiga.

Reflexión Domingo 03 de marzo de 2013



Tercer Domingo de Cuaresma

Dios nos ha liberado para encontrar la vida

Hoy en la primera lectura del libro del Éxodo encontramos a uno de los personajes centrales de la historia del pueblo de Israel: Moisés. Recordemos que él, siendo niño fue puesto por su madre en una canasta en el río, rescatado por la hija del Faraón y criado en la corte de Egipto. No perdamos de vista que Moisés también mató a un egipcio que maltrataba a un hebreo, huyó, y pasado el tiempo se casó con una de las hijas de Jetró. Hoy encontramos el texto en que Moisés, mientras está con los rebaños de su suegro, ve a una zarza que se arde en llamas pero no se consume: allí Dios manifiesta su presencia y su identidad. Cuando Dios le dice: “Yo soy el Dios de tus padres el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob”, le revela que no es egipcio sino forma parte de un pueblo: ¡es hebreo! Y al decirle: “he visto la opresión de mi pueblo, he oído sus quejas, conozco bien sus sufrimientos”… muestra que el Señor no es indiferente a la situación de los hebreos. Finalmente este texto manifiesta también como Moisés se dispone, a ayudar a Yahvéh, en esta liberación de sus hermanos.

En sintonía con las lecturas del día de hoy el salmista nos habla de cómo Dios: perdona las culpas, cura las enfermedades, rescata la vida de la fosa y colma de gracia y de ternura: es decir libera creyente al igual que rompió las cadenas de los que estaban esclavos en Egipto. La invitación del autor del Salmo 102: es bendecir a Dios por estos actos, y sobre todo, a no olvidar nunca estos beneficios.

Los Corintios, a los que Pablo dirige su carta, han recibido el bautismo y este bautismo implica la conversión. Hoy el Apóstol los lleva a recordar un evento importante para los creyentes: la liberación del pueblo de la tierra de Egipto, su paso por el mar Rojo, el modo como Dios los alimentó con el Maná y les dio a beber del agua de la roca. En una palabra les muestra como el pueblo ha sido testigo de grandes eventos. Sin embargo a pesar de haber sido liberados, alimentados y protegidos ellos se alejaron de él y buscaron la muerte. Esta es una historia que puede repetirse en el cristiano que también ha recibido grandes beneficios tales como: ser lavado en las aguas de bautismo o ser alimentado con la Eucaristía. Por eso hoy Pablo invita al creyente a no desear las cosas malas: porque al igual que aquellos hebreos podrían llevarlo a la muerte.

Hoy San Lucas nos presenta un pasaje especial: unos hombres han ido a ver a Jesús para contarle como Pilato había mandado matar a unos galilelos mientras ofrecían sacrificios. ¿Qué pensarían estos hombres al contarle a Jesús este evento? ¡No lo sabemos! Pero Lucas nos muestra como Jesús se vale de esto que le han contado para no creer que el que muere es más pecador que el que aún vive. La muerte de otros ha de ser vista, como una oportunidad, para darse cuenta si se está viviendo según Dios o se está viviendo lejos de Él. Permanecer lejos de Dios llevará al creyente no sólo a una vida estéril: sino a la muerte, de allí el ejemplo de la higuera que no da frutos. Jesús, en esta lectura, no quiere provocar pánico por no dar el fruto esperado sino más bien invitar a sus oyentes a evaluar su modo de vivir, provocar en ellos un cambio de actitud, y ofrecer los frutos que Dios espera de todo aquel que cree en su Palabra.

P. Óscar Alejandro Hernández Zavala, m. j.